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BUSCO PISO EN BARCELONA
miércoles, 9 de septiembre de 2009
viernes, 4 de septiembre de 2009
Sigue el ruiseñor la misma canción cantando
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3:55 am
Abro los ojos. Las manillas de mi reloj olfatean tu rastro. Los días en mi calendario suman apatía, restan emociones. Puedo contar los minutos que fuiste mío. Puedo sentir el puñetazo de tu ausencia. Despierto en cada sueño el recuerdo de tu indeleble pasión. Protejo, como si de la más fiel madre se tratase, la memoria de mi suspiro en tu sofoco. Se guarece en mi más devoto órgano el rastro de mi grito en tu ahogo...
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3:55 am
Abro los ojos. Las manillas de mi reloj olfatean tu rastro. Los días en mi calendario suman apatía, restan emociones. Puedo contar los minutos que fuiste mío. Puedo sentir el puñetazo de tu ausencia. Despierto en cada sueño el recuerdo de tu indeleble pasión. Protejo, como si de la más fiel madre se tratase, la memoria de mi suspiro en tu sofoco. Se guarece en mi más devoto órgano el rastro de mi grito en tu ahogo...
Oscuro. Tú. Yo. Lento. Fuerza.
Todo. Nada. Lujuria. Pasión.
Todo. Nada. Lujuria. Pasión.
Cualquier lúcido amago de reflexión me aleja irremediablemente de ti.
Y cuanto más me alejo, más me pierdo.
Cuanto más me alejo, menos veo; y esque tengo la vista clavada atrás...
en ti.
¡Ai vida!... Amor como el primero, no hay ninguno.
Y cuanto más me alejo, más me pierdo.
Cuanto más me alejo, menos veo; y esque tengo la vista clavada atrás...
en ti.
¡Ai vida!... Amor como el primero, no hay ninguno.
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